Feliz 2014

Los amigos del huerto os deseamos feliz y próspero año 2014.

Tras la fiesta del árbol y las vacaciones de navidad hemos estado algo dispersos, aunque de vez en cuando son necesarios los periodos de barbecho y recogimiento para fortalecerse y seguir adelante con nuestras aventuras de huerta.

Os contamos novedades del solar dónde realizamos la fiesta del árbol.
Los árboles y arbustos gozan de buena salud, seguro que en breve comenzarán a levantar la cabeza y se mostrarán con mayor belleza.
Merece la pena intentar mantener y cuidar el lugar, para lograrlo hemos colocado varios carteles en la misma zona y hemos pedido al grupo municipal de IU de Ciudad Lineal que presente en el próximo Pleno de la Junta de Distrito, una proposición para colocar papeleras en este área, esperemos que se concedan y que sea pronto.



En el huerto, resisten las siembras que preparamos días atrás, también las más recientes. Todas se preparan para brindarnos una gran explosión de verdor y colorido.

Los romeros, caléndulas, frambuesos, cornejos, lentiscos, aligustres, rosales, borrajas… embellecen y aromatizan el huerto.




Están hermosas, las lechugas de punta de lanza, coles, habas, acelgas, espinacas, puerros, ajetes y grelos, quizás porque fueron las primeras siembras del otoño con un clima muy suave.
Otras, como las lechugas romanas están algo mustias y parece que no han aguantado bien los últimos fríos aunque quizás revivan. 








Todavía no asoma el trigo, las remolachas, avena, almortas y zanahorias porque se pusieron hace escasas semanas ¡Tiempo al tiempo!.




Curiosidades de la huerta:

- Los primeros brotes de ajos, aquellos que se sembraron en luna creciente y luna llena, van asomando.
Nos ha sorprendido los últimos, los sembrados en luna menguante, porque hemos encontrado algún que otro diente escopetado sobre la tierra...


















- Los guisantes también resisten, pero solo han brotado los que están en medio del bancal. Pensando, pensando... algo de culpa puede tener nuestro árbol-logo, al que tuvimos que cambiar de lugar porque varias veces lo encontrábamos tirado sobre el bancal.